Siguiendo la historia completa, exámen físico y estudios radiográficos, un diagnóstico claro faltará aún en algunos pacientes. Si la necesidad para localizar el generador del dolor es aún demandado, el bloqueo nerviosos selectivo puede realizarce como ayuda para confirmar el diagnóstico. Los más comúnmente realizados son: bloqueo de la faceta, o bloqueo selectivo de la raíz.
El bloqueo nervioso puede ser usado efectivamente para proveer valiosa información acerca de donde está localizado el específico generador del dolor.
El bloqueo de la faceta ha sido abocado como un bloqueo diagnóstico por la dificultad en realizar la examinación directa de la faceta. La historia y el exámen físico frecuentemente proveen hallazgos positivos no específicos para enfermedad facetaria. La examinación radiológica frecuentemente encuentra patología facetaria, pero estudios han demostrado que los pacientes con degeneración facetaria por radiología pueden ser asintomáticos. Un activo debate continúa por la validez del diagnóstico de Síndrome facetario y / o la capacidad por alterar el curso de la enfermedad facetaria con técnicas de bloqueo nervioso. Esto parece probable ya que la faceta puede jugar un rol significativo como un generador de dolor en el dolor lumbar, y los pacientes pueden beneficiarse con esta información.
El bloqueo nervioso de la raíz ha sido usado cuando los otros estudios han fracasado para identificar concretamente una raíz nerviosa en particular como la etiología del dolor. Esto ocurre en pacientes en quienes el dolor puede no adoptar un patrón dermatomal o cuando la patología intraespinal es suficientemente compleja como para impedir el conocimiento de qué es lo que está produciendo el dolor. Aislando una raíz nerviosa y anestesiándola con una pequeña cantidad de anestésico local puede proveer una evidencia confirmatoria de si esta cumple el rol de generador del dolor. Esto debería ocasionar un alivio temporario del dolor por bloqueo selectivo de la raíz que no asegura la descompresión quirúrgica u otras modalidades de tratamiento (ej. Inyección de esteroides en la raíz nerviosa) que pueden efectivamente resolver el dolor.
La diferenciación de bloqueo espinal o peridural han sido frecuentemente abogadas en pacientes con síndromes de dolor simpático, aunque su capacidad para bloqueo de nervios simpáticos no ha sido bien establecida.
Estos bloqueos pueden proveer información selectiva para algunos pacientes que tienen dolor lumbar radicular.
Los pacientes que tienen condiciones neuropáticas y dolor el cual está centralizado no derivará en alivio del dolor durante el bloqueo diferencial, además de un completo bloqueo con anestésicos locales a nivel de la columna.
Un bloqueo central neuroaxial diferencial puede también ser usado para determinar una respuesta placebo.

 

El rol del bloqueo nervioso en el manejo del dolor lumbar tiene muchas facetas. La mayoría de los bloqueos son indicados para ser terapéuticos. Igualmente beneficiosos son algunos bloqueos que proveen información diagnóstica. Ya que el dolor lumbar presenta síntomas y signos o específica, la información provista es esencial y frecuentemente no obtenible por otros estudios.
La eficacia del bloqueo nervioso para el dolor lumbar crónico, ha sido lento en su evolución. Mientras muchos médicos discuten los beneficios de estos procedimientos la evidencia científica está faltando. Faltan aún buenos estudios controlados y randomizados.

Bloqueo nervioso mioneural

Algunos de los músculos más largos del cuerpo se encuentran en la región lumbar.
Estos músculos ayudan a mantener erecta y permitir los movimientos de diferentes maneras. La lesión de estos músculos esta indiscutible; de cómo ellos responden después de un trauma y porqué algunos pacientes desarrollan síntomas de después de una lesión no está claro.
Una modalidad de tratamiento para el dolor lumbar de orígen musculoesquelético es la inyección en los puntos dolorosos.
Diferentes estudios han examinado los beneficios del bloqueo nervioso mioneural en el dolo lumbar crónico. Algunos han demostrado mejoras después de la inyección de anestésicos locales y / o corticoides.
Los puntos gatillos musculoesqueléticos más comunes en el dolor lumbar incluyen: músculos glúteo, erector espinal, cuadrado lumbar y piriforme. Un conocimiento de los patrones de referencia de estos músculos y el exámen de su presencia es esencial para una apropiada inyección.
La inyección en los puntos gatillo se debería basar en los patrones de referencia de dolor y el exámen físico. Es aconsejado el uso de una pequeña aguja indicadora (ej. 25) y la longitud es determinada por el tamaño del paciente y el músculo inyectado.
Una combinación de Bupivacaína 0,75% (para la analgesia sensitiva), etidocaína 1% (para un bloqueo motor prolongado) y dexametasona (4mg/10 ml, como antiinflamatorio) se usa.